
La Iglesia de San Cayetano, además de acoger los restos del Justicia de Aragón, Don Juan de Lanuza, guarda el llamado por los zaragozanos, Cristo de la Cama, héroe de los Sitios y muy familiar para los zaragozanos, pues es el mismo que sale en la procesión de Viernes Santo. Un interesante documento a la izquierda del altar, da fe de la autenticidad y derecho de la venerable imagen. Por el testimonio tan directo que supone la concesión de la Medalla de los Sitios, y la manera tan informal que tuvo el escribiente de adecuar la matriz fija de imprenta, a este caso tan peculiar, lo reproduciremos íntegro en cuanto al texto se refiere y respetando los párrafos manuscritos, que irán en cursiva.
1808 1908
D. ANTONIO MAURA Y MONTANER
Presidente del Consejo de Ministros

Por cuanto en observancia de lo establecido en el Real Decreto de nueve de Julio de mil novecientos ocho, declarando condecoración oficial la MEDALLA denominada DE LOS SITIOS DE ZARAGOZA, creada por la Junta de esta Inmortal ciudad para conmemorar el primer Centenario de aquellas gloriosas defensas y atendiendo a las circunstancias que ocurren en Don La Sagrada Imagen del Santísimo Cristo de la Cama de la Real Hermandad de la Preciosa Sangre,
S.M. se ha servido otorgarle la MEDALLA de Oro.
Por tanto y con arreglo al artículo ….. de dicho Real Decreto, expido el presente al referido Señor, imagen que conserva las huellas de las balas francesas recibidas el 10 de Enero de 1808 al ser trasladado desde su derruída Capilla del Convento de San Francisco al Santo Templo del Pilar, como justificante del derecho a usar la referida Medalla.
Dado en Madrid a quince de Junio de 1.909. A. Maura.
Certificado para usar la MEDALLA de Oro conmemorativa del primer Centenario DE LOS SITIOS DE ZARAGOZA a favor del Santísimo Cristo de la Cama de la Real Hermandad de la Preciosa Sangre de Zaragoza.
Inexplicablemente además, la fecha que cita el documento corno heroica, en la que se le infligieron las ‘heridas», etc, es errónea, pues la frenética carrera bajo los puntos de mira de la fusilería francesa, no tuvo lugar el 10 de enero de 1808, sino el 17 de febrero de 1809.
Como curiosidad añadiremos que el original, aparte del escudo Real, el de la ciudad y las reproducciones del anverso y del reverso de la Medalla de los Sitios concedida, lleva un tampón de autenticidad del Centenario, y en su parte superior, cómo no, una póliza.
La hazaña a la que se refiere el documento (insistimos, con fecha equivocada) fue la protagonizada por María Blánquez, que alcanzó por tan valerosa acción el derecho a aparecer en el Portillo entre las heroínas defensoras de Zaragoza…, como ya hemos visto.
Tomamos el relato de unos Recuerdos… aparecidos con motivo del CL Aniversario de los Sitios, basados en el diario de Casamayor:
Aquel día, 17 de febrero, los fuertes ataques enemigos hicieron concebir el temor de que el convento franciscano fuese totalmente arrasado (de hecho, desde el día 14 estaba ya en manos francesas).
Con voluntad de heroína, una mujer llamada María Blánquez penetró en la derruida capilla y tomando una bandera de las cinco que figuraban las partes del mundo, avisó a unos hombres para salvar de la hecatombe la efigie de Nuestro Señor… Alumbrada la sagrada imagen con dos velas, marcharon al palacio del General Palafox por aquel dédalo de calles y encrucijadas, ya que la actual Alfonso I y circundantes, no eran entonces más que un estrecho y cerrado trenque. Silbaban las balas, y aunque algunas rozaron la preciosa escultura, lastimándola ligeramente, quiso Dios que los meritísimos porteadores lograran llegar indemnes.
Posteriormente se dispuso el traslado de la imagen al Pilar, donde quedó expuesta en la Santa Capilla de la Virgen, frente al altar de los Santos Convertidos. Finalmente, en 1813, la Hermandad de la Sangre de Cristo fijó su sede en S. Cayetano, y desde entonces se venera allí la imagen.
Los franceses levantaron el primer sitio el día 14 de agosto. Al día siguiente, festividad de la Asunción, y con gran campaneo en todas las iglesias, se desató el lógico júbilo ciudadano, que cristalizó en un primer te-deum de acción de gracias a las seis de la tarde en el Pilar, con todas las autoridades. La solemnidad de la Iglesia de San Cayetano la hizo merecedora el 16 de Agosto de 1808 de albergar bajo sus bóvedas a la Real Audiencia que allí cantó su Te-deum de acción de gracias.
Visitas: 17