Por JAVIER CAÑADA SAURAS
Noviembre 2012
Siguiendo la Ruta prevista, visitamos el antiguo Convento de los Frailes Mínimos, también llamado “de la Victoria”. Situado en la calle Ramón y Cajal, lo que en su origen fueron claustro y dependencias del Convento hoy están ocupados por el Parque de Bomberos nº 2 y el Museo del Fuego de Zaragoza.
Mínimos son los miembros de la Orden religiosa fundada por el calabrés San Francisco de Paula en el año 1435. El nombre hace referencia comparativa a los Frailes Menores de San Francisco de Asís y sugiere la gran humildad que habría de caracterizar a los religiosos de esta Orden.
En España, a los Frailes Mínimos se les denomina “de la Victoria” o «Victorios», a causa de la victoria que, gracias a su apoyo, el rey Fernando el Católico consiguió en 1487 sobre los moros en el cerco de la ciudad de Málaga.
En Zaragoza, el Convento se fundó el 27 de enero de 1576 siendo el Corrector Provincial Fray Gabriel Español. Perteneciente a la parroquia de San Pablo, estaba situado entre las calles denominadas en el siglo XVI Campo del Hospital y calle de los Ciegos, que por su ensanche pasó a llamarse Plaza de la Victoria, y muy cerca del Campo del Toro. La zona era de carácter agrícola y artesanal, y en la iglesia del convento estaban situadas las capillas de los gremios o cofradías del barrio. Entre ellas, consta en el año 1692 el traslado por falta de espacio del retablo de San Homobono, propiedad de la cofradía de maestros sastres de Zaragoza, desde su capilla de la iglesia de San Felipe a otra del Convento, y su colocación en el crucero de la capilla mayor.
En Aragón, destacaron los conventos de los Mínimos de Nuestra Señora de Gracia, existente en La Fresneda, y el de Santa Ana, en Fuentes de Ebro.
La construcción del convento, de gran monumentalidad, se realizó bajo la dirección del maestro de obras Clemente Ruiz, ofreciendo una gran elegancia y armonía en su disposición arquitectónica. Se conserva el elemento más importante de la edificación: su patio claustral.
En la Guerra de la Independencia sirvió de cuartel y de refugio a los zaragozanos, siendo objeto de frecuentes e intensos bombardeos por parte del ejército francés.
La fachada principal, diseño del arquitecto Ricardo Magdalena, abre a la Plaza de la Victoria. El edificio se rehabilitó pensando tuviera dos utilidades: el Parque de Bomberos nº 2, sito en el espacio que ocupaba la iglesia del convento, donde se han conservado las capillas laterales con bóvedas y pinturas originales, y el Museo del Fuego y de los Bomberos, que se ubica sobre lo que fue el claustro y dependencias del convento. Finalmente, una parte del edificio se ofreció a la Universidad de Zaragoza, en cuyas aulas se imparten sus Cursos de Español para Extranjeros.
El Museo del Fuego y de los Bomberos fue inaugurado el 22 de junio de este año 2012 por el Alcalde del Ayuntamiento de Zaragoza, D. Juan Alberto Belloc, el consejero de Política Territorial e Interior del Gobierno de Aragón, D. Antonio Suárez, y el rector de la Universidad, D. Manuel López.
Los propios bomberos se encargan de la conservación de los diversos y valiosos objetos y piezas existentes en su Museo y realizan visitas guiadas al mismo.